Cuando llega la edad de las responsabilidades y uno necesita salir del hogar de los papás, se encuentra con el dilema si irá alquilar una casa o si será mejor idea comprarla a través de un préstamo hipotecario. Bien, pues el comprar o alquilar casa es una de las decisiones con mayor carga emocional y de responsabilidad que se puede adquirir.
Así que es bueno que se detenga un poco y empiece analizar todos los detalles que conllevan los dos panoramas, nosotros por nuestra parte no pretendemos satanizar ninguna, pues le diremos que las dos pueden ser buena o mala inversión dependiendo del momento.
Aspectos a considerar sobre comprar o alquilar casa
En primer lugar debe hacer un recuento de sus deudas y gastos fijos, el resultado no debería sumar más del 40% de sus ingresos, si ese es el caso, el endeudamiento de hipoteca no puede exceder el 30% de lo que le ingresa al mes.
Estos cálculos son importantes porque financieramente hablando usted siempre debe contar con un fondo de emergencia y eso debe representar al menos el otro 30% del total de ingresos. Tener este colchoncito de dinero le ayudará a lidiar con los gastos imprevistos, pues recuerde que ahora usted será responsable de todas las reparaciones de la vivienda.
Sí su cálculo no coincide con lo indicado, es mejor contemplar la posibilidad de alquilar y buscar una estabilidad financiera que le permita organizarse, de lo contrario correría usted el riesgo de no poder cumplir con sus cuotas en tiempo, subir el endeudamiento por mora y terminar perdiendo lo invertido. Con las finanzas las cosas son así de serias o se organizan bien o el menor descuido puede ser fatal.
Aunque la adquisición de una casa pareciera una decisión meramente de finanzas, el área de realización personal influye en gran medida, ya que para adquirir una propiedad debes estar lo suficientemente seguro que quiere vivir en el mismo lugar durante los próximos 10 años, como mínimo.
Si usted tiene planes de viajar por motivos de estudio o de realización profesional será mejor esperar un poco y alquilar mientras tanto, pues en ocasiones las oportunidades laborales que se están buscando surgen lejos de casa y le puede producir un choque emocional y financiero el hecho de dejar el hogar.
Aunque también está la posibilidad de ponerla en alquiler el tiempo que considere necesario y de ahí subsidiar las cuotas, pero debe estar consciente que algunos inconvenientes pueden surgir, como el asegurarse que los inquilinos no deterioren la propiedad, asumir reparaciones, tiempo sin inquilinos y demás.
Otro factor a considerar es el estilo de vida, hay quienes nacen con espíritu muy libertador y no conciben la idea de atarse a una deuda o de vivir en un mismo lugar por mucho tiempo; si es este el caso, el alquiler es la elección más acertada.
Aunque a manera de consejo usted debería ir pensando en la compra de una casa para luego de la jubilación, porque para ese momento ya se habrán perdido las fuerzas y el alma va necesitando estabilidad.
Es bien sabido que los bienes raíces son una inversión segura, los inmuebles adquieren valor a lo largo del tiempo, su encarecimiento aumenta alrededor del 3% anual, dependiendo de la tasa de inflación, así que comprar y vender le puede resultar favorable con el paso de los años.
Otra opción es adquirir una casa prefabricada, esta tendencia está aumentando en el mundo de la construcción debido a su durabilidad, economía, flexibilidad e incluso movilidad, se puede trasladar la casa a otro lugar cuando se considere necesario.
Muy contrario a lo que parece, una casa prefabricada puede solucionar muchos de los inconvenientes que mencionamos anteriormente y lo mejor es que los diseños no son necesariamente estándares, usted puede obtener la casa de su preferencia con un proyecto llave en mano.
En fin, solo nos resta decir que el comprar o alquilar casa dependerá mucho de su estabilidad financiera y su realización personal, analice bien todas sus posibilidades y tome la decisión que considere de su conveniencia.